Torta de Requesón con Mermelada de Higos
La receta original está hecha con queso Ricotta, pero como no lo tenía y no siempre es fácil de encontrar, la preparé con requesón que me había regalado una vecina hecho por ella en casa y el resultado es espectacular.
No siempre se tiene la suerte de tener un vecino que siga haciendo las cosas de manera totalmente artesanal, así que no pasa nada si lo haces con requesón industrial, estará igualmente buena.
Siempre me gustan las recetas sencillas que pueda hacer cualquiera y está es una de ellas. El único inconveniente es que la masa es un poco delicada de manejar, se rompe con facilidad pero no pasará nada si a la hora de extenderla lo haces entre dos papeles de horno y luego te ayudas del rodillo para colocarla en el molde. Así que vamos con la receta.
Ingredientes:
Masa:
- 350 grs de harina tamizada
- 2 yemas
- 1 cucharada de Royal
- 150 grs de azúcar glas
- 150 grs de mantequilla
- 1 cucharadina de ralladura de limón
Relleno:
- 500 de requesón
- 2 huevos más 1 yema
- 100 grs de azúcar
- 1 cucharadina de vainilla
- 1 cucharada de queso crema (tipo Philadelphia), yo uso el de Mercadona.
- 1 yogur griego
Preparación:
Ligar todos los ingredientes de la masa con suavidad, envolver en papel film y dejar reposar en el frigorífico 30 minutos.
Mientras, prepara el relleno mezclando bien todos los ingredientes.
Repartir la masa en dos partes, una un poco más grande que la otra.
Estirar entre dos papeles de horno, cubrir con la parte más grande la base del molde y cubrir con la mermelada de higos.
Añadir el relleno y tapar con la otra parte de la masa. Sellar bien los bordes para que no se escape el relleno. Pinchar un poco la masa para que respire. Vamos, para que salgan los vapores y no se hinche.
Hornear a 180º unos 40 o 50 minutos.
Cuando esté completamente fría espolvorea con abundante azúcar glas.
Ya sabes que cada uno tiene sus gustos. A mí me encanta la mermelada de higos y si es casera pues mucho mejor, pero si a ti no te gusta pues la sustituyes por mermelada de fresa, ciruela... o por la que más rabia te dé.
No dudes en probarla. Es un tipo de tarta de queso pero la masa que la cubre le da un toque diferente rico, rico. No te agobies para que te quede con una forma perfecta, es una tarta rústica y es parte de su encanto.
¡¡Qué no me entere yo de que no te pones a caciplar aunque sea un poco!! ¡¡Venga, manos a la obra!!
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